Esta noticia, si bien no es noticia ¨última hora¨, lo cierto es que es algo muy especial para nosotros y más de un cliente y amigo, nos lo ha recordado. Hace ya unos cuantos años, mi hermano Miguel y yo (Rafael, cofundadores de OS2O, en aquellos días OSSOSOSO) decidimos abrir un puesto de venta de ropa de montaña en la Gran Vía de Zaragoza, lo que entonces se llamaban (y creo que aún se llaman) los puestos hippies de la Gran Vía.
De una forma muy humilde y artesanal (y currando un huevo para salir a flote), y guiados por la idea de ofrecer ropa de calidad a un precio razonable (motivada por nuestros años de estudiantes en los que nos equipábamos de las ¨sobras¨ que nos iba dando nuestro tío el montañero) cruzábamos el mundo buscando prendas de montaña funcionales y que pudiéramos ofrecer a unos precios más normales de lo que veíamos por ahí. Mucho forro polar, chaquetas cortavientos básicas, alguna prenda impermeable.
Para vender, nada mejor que el contacto a pie de calle: en Navidades abríamos el tenderete y lo cierto es que, por mucho frío que hiciese, lo pasábamos bomba. Zaragoza entera pasaba por delante, nos reencontrábamos con amigos, para protegernos del cierzo nos tomábamos los cafés calientes (del termo que nos traía nuestra madre) con el resto de colegas hippies 😉 y veíamos que nuestros primeros clientes apreciaban nuestra ropa y valoraban muy positivamente el esfuerzo que hacíamos por traer esas prendas.
Alberto Fau
Me gusta mucho vuestra ropa os compré un pantalón de montaña y un polar hace muchos años en una tienda que abrieron en. Valencia en la calle del mar y son eternos muy. Buena calidad , me podrías decir donde puedo comprar vuestra ropa en valencia porfa muchas gracias y adelante tenéis una Rios espectacular
Jesus Valero
Perdona por no contestarte antes Alberto, puedes comprarnos online: os2o.com
Tiendas físicas en Barcelona, Madrid y Jaca
JOSE GONZALEZ
Felicidades, gran equipo, y ropa de calidad
korku
lOS PASOS SIEMPRE HACIA DELANTE!!! Hacia atrás solo para coger carrerilla!!!!!
Rafael
Sin duda, Korku, no se puede parar! 😉