Tozal del Vero: Reseñas e información

Por Carlos Garrido del Alpine Team de OS2O

El cañón del Vero en la fabulosa y archiconocida Sierra de Guara es un entorno privilegiado rebosante de belleza. Sus cristalinas aguas de un característico verde turquesa, dan nombre a este serpenteante río e invitan al baño en los meses más calurosos del año. El inexorable paso del tiempo y la lenta pero implacable acción del agua han modelado este barranco, labrando una majestuosa obra de verticales paredes calizas salpicadas de caprichosas concavidades, cuevas y figuras escultóricas. El barranco es recorrido todos los años por miles de visitantes que buscan refrescarse y disfrutar del majestuoso paisaje que rodea este conocido cañón.

Tozal del Vero

Uno de los puntos del recorrido que más llama la atención a su paso es la espectacular y gigantesca cueva bajo la Peña Bovín. Un desplome colosal coronado por una extremadamente vertical pared que alcanza los 300 metros de altura, convierte al visitante en algo minúsculo e insignificante ante semejante mole rocosa, siempre custodiada por las aves, verdaderas soberanas de la Peña.

Rapelando la bóveda

Por supuesto, este muro no ha pasado desapercibido por los escaladores, siendo más conocido como el Tozal del Vero y albergando actualmente numerosas pero poco conocidas rutas de todos los estilos, predominando el libre difícil y la escalada artificial. Lo alejado y salvaje del lugar lo han mantenido en una discreta posición frente a otras paredes aunque la actividad sobre sus muros se haya mantenido constante en los años.

Aprovecharemos este nuevo post en el OBlog para hacer un breve recorrido de algunas de sus vías y recopilar información fresca de esta gran desconocida pared.

Vista general

Como es habitual en la Sierra de Guara, la escalada es una actividad regulada dentro del territorio del Parque. La Peña Bovín no es una excepción y sólo la podremos escalar del 1 de agosto al 30 de noviembre, según la ORDEN de 28 de diciembre de 2015, publicada en el Boletín Oficial de Aragón del 8 de febrero de 2016.

No sólo esta regulación puede afectar a nuestra intención de escalar el Tozal del Vero, también su orientación es decisiva a la hora de planificar la jornada, ya que se trata de una cara Oeste que recibe el influjo solar a partir de la una o dos del mediodía, convirtiéndola en una auténtica sartén en los días más calurosos. Por lo que el otoño suele ser la temporada ideal para recorrer sus líneas, al fresco de la mañana pero al soportable calor de la tarde.

Vista desde el Tozal de las Macetas

La primera vía que recorre esta pared data ni más ni menos que de 1986, por el incombustible visionario Jesús Gálvez en compañía de Rafael Celestino, dando lugar a Tuestrolón (320m 6c/A2). Es una vía que se repite ocasionalmente combinando libre y artificial, es aconsejable calcular un día muy largo o un vivac. No hay que menospreciar el grado de la reseña, ya que como suele ser habitual en las vías con sello Gálvez los quintos (V) se venden caros.

Reseña de Tuestrolón

Posteriormente a esta apertura, que abre la veda del Tozal, otras cordadas se animan a dejar su legado en la pared, naciendo así en 1989 la No se lo Digas a Nadie (300m, 6a/A3) obra de una potente cordada catalana compuesta por Josep Mª Codina “HUSA”, Cristóbal Díaz y David Atance “ESPA”. Tampoco es una vía que cuente con muchas repeticiones, pero recorre uno de los paños más bellos y compactos de la pared. Recientemente se ha intentado liberar sin éxito, debido en parte a su vetusto equipamiento con buriles de casi 30 años. Calcular también una larga jornada o vivac.

Reseña de No se lo Digas a Nadie. Tozal del Vero. Sierra de Guara. Reseñas. Croquis

Ese mismo año, Antonio García Picazo, otro de los más prolíficos aperturistas del país deja su impronta en el Tozal, dando lugar a El Fin de la Esperanza (315m, 6b/A2), inaugurando así el paño central de la pared.

El Fin de la Esperanza

Una característica especial del Tozal del Vero son las franjas de arenisca que lo cruzan a distintas alturas. Estas franjas presentan una roca más blanda y fracturada, que dificulta tanto la progresión en artificial como en libre. Otra peculiaridad es la escasez de fisuras en las que poder autoprotegerse, por lo que el uso de expansivos es más habitual que en otras paredes de este tipo dado lo compacto y plaquero de la roca.

Siguiendo el estilo de las anteriores aperturas en el 92 nace La Ley de Mr. Hook (330m, 6b/A2+), haciendo referencia al particular artificial de esta pared donde predomina el uso de gancheos en las gotas de agua y rugosidades que ofrece el calcáreo.

Ley de Mr Hook

Por fin en 97 Alberto Sepúlveda (Sepu) y compañeros se animan a forzar un poco más la escalada libre, dando lugar a Abierto Hasta el Amanecer (7a+/A2). Todavía se resiste el Tozal a regalar una línea libre de tramos de artificial. Pocos meses después Jordi Corominas culmina en solitario El Lado más Bestia de la Vida (300m, 6a/A3), entrando por una burilada salvaje que atraviesa parte del desplome inferior del flanco izquierdo de la pared.

Abierto hasta el Amanecer y El lado mas bestia de la vida

En 2001 una cordada euskaldun recorre el flanco derecho con una nueva vía de artificial llamada Intza Bidea (240m, V/A3). Vía que posteriormente pudimos liberar Edu González y yo en la que ha pasado a llamarse Combinación Mágica, resultado de combinar Intza Bidea con una apertura de Edu en la parte superior del muro que se llamaba Los Secretos del Vero. El resultado es la única vía hasta el momento que alcanza íntegramente en libre la cima de la Peña Bovín. Pese a no tener ningún largo extremadamente duro (ED-, 325 m, 7a+) es una vía de compromiso que en su segundo y tercer largo exige determinación y asumir algún pasaje expuesto. Pese a lo que pueda poner en la reseña está lejos de ser una “clásica”, si bien se repite con cierta asiduidad.

Reseña de Intza Bidea

Combinación mágica

Edu en el tercer largo de la liberación de Intza Bidea

En la Travesura Picapiedres

Precisamente Edu González ha sido el principal dinamizador de la pared en los últimos años, arrancándole vías de libre difícil en las que predomina el equipamiento con parabolts con tramos de autoprotección. Algunas de ellas son Esperanza y Camino Rojo, vías cortas e intensas donde poner a prueba la resistencia de brazos y dedos. Especialmente en Esperanza, con un grado obligado de 7a+/b muy expuesta y sin repeticiones hasta el momento.

Esperanza

Camino Rojo

Jaume Clotet “Paca” también se aventura en esta pared trazando Soloterapia (315m, V/A3), abierta en solitario como su propio nombre indica y cruzando audazmente los muros rojizos de arenisca del paño central de la pared, invirtiendo 7 vivacs en la apertura de una ruta donde predomina la escalada artificial en todo su recorrido.

Soloterapia

Poco después vería la luz la que sí se ha convertido en la “clásica” de la pared, Vértigo, abierta desde abajo en solitario por un motivadísimo y persistente Edu que gracias a su trabajo ha quedado una vía de disfrutar con largos “5 estrellas” y equipamiento “amable”. Aun así tampoco hay que menospreciarla, pues podemos acabar con sobredosis de láctico en nuestros petados antebrazos.

Vértigo

Largos de escándalo en Vértigo

David Palmada “Pelut” es otro conocido “artificiero” que también se ha fijado en el Tozal, más concretamente en la gran bóveda de roca dudosa y pequeñas fisuras, trazando así dos cortas pero muy desplomadas rutas que cruzan toda la cueva. Nosferatum Wall y Amantes del Pedal.

Nosferatum

Otra acrobática ruta de Edu, recorre el flanco izquierdo por muros grisáceos de buena roca con una aérea y espectacular travesía sobre la gran cueva. Con el nombre de Oscar Pérez (270m, ED, 7b, 6c/A1) rinde homenaje al desaparecido escalador y alpinista de Tramacastilla en el Latok II.

Óscar Pérez

Edu no ceja en su empeño de conocer y recorrer cada paño de roca de esta mole calcárea y es así como inaugura otra nueva vía junto a Iker Madoz, Pastelito Rebelde (230m, ED, 7b+, 6c obl.) convirtiéndose ésta en una de las vías más repetidas junto a la Vértigo. Largos de gran calidad sobre roca excelente y muy mantenida en el séptimo grado son sus principales atractivos. Además del estilo de la apertura donde los parabolts de métrica 10 conviven con tramos donde toca protegerse.

Pastelito Rebelde

Edu en Pastelito

El incansable asturiano también consigue engañarme a mí para surcar los últimos paños de roca virgen de gran calidad. Solo que esta vez toca pagar el peaje de la gran bóveda y su nefasta roca para poder llegar a los soñados muros grises. Es así como surge la última apertura de la pared dando lugar a Materia Gris (300m, ED+, 7c+, 7a obl.) Vía dura y mantenida que aprovecha un largo de artificial de El lado más bestia de la vida, para luego continuar su propio camino por muros verticales de agujeros y gotas donde exprimir hasta las últimas fuerzas.

Materia gris

Edu trabajando la fisura del primer largo

Bonita fisura en el tercer largo

Placa brutal y atlética en el cuarto largo

Ambiente insuperable del último largo

Para llegar a la base del Tozal podemos hacerlo bien desde Alquézar o desde Radiquero, siendo desde éste último pueblo la mejor opción por hallarse la pista en mejor estado. En la parte alta del pueblo de Radiquero cogemos la pista que lleva a San Pelegrín, tras atravesar el pequeño pueblo tomamos el desvío de la derecha hacia el Mesón de Sevil. Si nuestro vehículo no es demasiado alto conviene aparcar un poco más adelante (Parking 1), antes de tomar un nuevo desvío a la derecha donde la pista empeora notablemente su estado. Si decidimos continuar en coche hemos de pasar el parking de la zona de escalada de San Pelegrín  y continuar pista abajo hasta un tramo más plano en el que tras pasar un sendero balizado hacia la izquierda aparece un gran hito de piedras y un pequeño apartadero a la izquierda (Parking 2). Desde ese apartadero nace la senda que tras 40 minutos de descenso nos deja bajo la pared. Cuando ya estamos bajo el Tozal y tras pasar una zona húmeda que siempre tiene barro, el sendero se bifurca y tendremos que coger el ramal derecho que baja diagonalmente hacia el río. De seguir recto hacia arriba nos iríamos al Tozal de las Macetas. Una vez en el río si éste lleva poca agua no tendremos problema en cruzarlo, al contrario será si lleva agua, por lo que tendremos que poner especial atención por dónde cruzar si no queremos acabar a remojo. Cuando estemos bajo la gran bóveda si queremos ir hacia alguna de las vías de la derecha subiremos entre las rocas lo más pegados posible a la pared hasta internarnos en un bosque de gigantescos bojes buscando con intuición la débil senda que nos conduce hasta los pies de vía.

Acceso a la pared

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1 comentario

  1. gran resumen! felicidades!

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