Por OS2O Design Team
En un artículo previo hablamos sobre los métodos para la medición de transpirabilidad de los tejidos y los valores de referencia desde los funcionalmente aceptables (10k*) hasta los de alto rendimiento (>30k).
*Recordemos que 10k es una simplificación de 10.000g/(m²·24h), es decir, a través de 1 m² de tejido se pueden evaporar 10 litros de agua al cabo de un día.
Los tests son las pruebas de laboratorio que se hacen para determinar la calidad de los tejidos. Es cierto que un tejido que ofrece 30k tiene una mayor calidad que un tejido de 10k. Sin embargo, el rendimiento de la prenda una vez confeccionada puede variar y, generalmente, el valor real es inferior al valor en laboratorio. Por tanto, estos valores deben considerarse como una referencia y no como un indicador del rendimiento.
No todos los fabricantes de tejidos especifican el test realizado aunque, sin embargo, sí que todos reportan los valores obtenidos, lo que es utilizado como un argumento de venta más que como un indicador de la calidad del tejido y del rendimiento de la prenda confeccionada. Incluso las diferencias en los tests realizados también ofrecen información que puede confundirnos. Por ejemplo, la resistencia al vapor de agua expresada en RET no es equiparable a la permeabilidad del vapor de agua sino, simplificando, inversamente proporcional. El fabricante eVent® es de los pocos que miden tanto la resistencia como la permeabilidad del vapor de agua.
Comparativa de las membranas eVent®
El valor RET es una referencia del confort de la prenda; cuanto menor sea este parámetro, más cómoda es la prenda (menos resiste a la evaporación, por tanto más transpira). Pero presenta dos grandes imprecisiones. La primera, no indica si las personas usadas en el test son una muestra representativa de la población general. La segunda, ofrece rangos y no valores exactos. Así pues, el rango 0-6 indicaría el mayor confort; pero no hay ninguna descripción que especifique diferencias precisas entre dichos valores, con lo que no es posible cuantificar la mejora entre un RET 3 ó 5.
Hay que tener en cuenta que los tests se realizan siempre en laboratorios. En condiciones reales, como vimos en este post, es la interacción de diversos factores lo que influye en la comodidad que ofrecen las prendas. De hecho, un parámetro muy personal y muy importante es la sudoración de cada persona. Prendas cuyo tejido ofrece valores superiores a los 30,000g/(m²·24h) pueden tener un rendimiento poco confortable si son utilizadas en condiciones poco propicias para el rendimiento óptimo del tejido.
En OS2O consideramos que los datos de transpirabilidad o impermeabilidad no solo son necesarios sino de vital importancia de cara a poder comparar distintas membranas y así tener una información fundada a la hora de adquirir un producto. Además, como clientes de otros productos, pensamos que tener esos datos es un derecho de los consumidores. Por eso, en la ficha de cualquier producto OS2O siempre se puede descargar el análisis de laboratorio de la membrana utilizada, así como el test empleado, algo que nos gustaría que otras marcas hiciesen cuando ofrecen datos más que dudosos en muchas ocasiones.
Transpirabilidad en los tejidos y comodidad
El confort es un estado de equilibrio y bienestar, psicológico y físico, entre el humano y el medio ambiente. En un día normal, la energía que se gasta puede ser de hasta 50 watts-hora por metro cuadrado. El calor generado al producir esta energía se disipa a través de la piel como sudor. En reposo el cuerpo puede producir 60 mililitros de vapor de agua por hora. Un ejercicio moderado puede aumentar esta cantidad hasta los 450 mililitros por hora. En actividades FAST&LIGHT, la transpiración puede aumentar hasta los 840 mililitros por hora.
El sudor permite refrescar el cuerpo y mantener la temperatura de forma estable a 37ºC. Cuando nos encontramos realizando actividades en montaña, el sudor es absorbido por la primera capa de ropa y transportado al exterior en función del sistema de capas que se utilice. Si este sudor no se evapora al exterior, el cuerpo no se enfría y como resultado se genera más calor y más sudor. Esto puede impactar negativamente en el rendimiento deportivo y suponer un peligro al afectar a nuestro equilibrio térmico.
¿Cómo se obtiene el mejor rendimiento de una prenda impermeable y transpirable?
Los sistemas de capas funcionan de forma óptima cuando las propiedades de cada una de ellas se complementan: una prenda con altas propiedades impermeables y transpirables compromete su eficiencia si las primeras y segundas capas no son de alto rendimiento. La capa interior en contacto con la piel es clave para mantener el equilibrio térmico. Sus principales propiedades son la de evaporar el sudor de la superficie de la piel y transportar dicha humedad hacia fuera. Las primeras y segundas capas son la primera línea de transporte de sudor y, cuanto más rápido hagan esa función, más cómodo se sentirá el usuario. Las mejores prendas de primera y segunda capa son las de lana merino, polipropileno y poliéster. Algunas de esas prendas se acompañan de tratamientos hidrofóbicos. Sin embargo, esto no aporta una mejora significativa ya que dichos tratamientos van desapareciendo con los lavados.
Para tener una comprensión más profunda del funcionamiento de las prendas impermeables/transpirables, es necesario conocer cómo funciona el proceso de sudoración y su evaporación. Como proceso físico, el calor fluye desde las superficies calientes hacia las frías. Cuando las temperaturas son elevadas, por encima de los 37.7ºC, la radiación, conducción y convección no son suficientes para transportar el calor del cuerpo al exterior. El cuerpo debe evaporar el calor para enfriarse. Esta evaporación se produce mediante dos procesos:
- La transpiración insensible consiste en el continuo secado de la humedad de la superficie de la piel en contacto con el ambiente. Las mediciones establecen que en un día normal esta evaporación podría ser de entre 0.7 a 0.95 litros por día.
- La sudoración es un proceso que ocurre en el interior del cuerpo activado por el hipotálamo cuando la temperatura de la sangre se eleva. Las glándulas sudoríparas se estimulan y las gotas de sudor fluyen a través de los capilares de la piel. Una vez en contacto con la piel, esas gotas de sudor retiran el exceso de calor de la superficie de la piel para evaporarse. Este proceso es de lo más eficiente, no solo porque enfría la piel en contacto con el ambiente, sino porque además disipa el calor del interior del cuerpo. Este exceso de calor se manifiesta mediante un vapor cálido que ocurre a través del proceso de convección. El calor necesario para evaporar la humedad se llama calor latente de vaporización. La evaporación es más rápida cuando el ambiente es relativamente más seco. En condiciones de alta humedad y elevada temperatura el sudor no logra evaporarse y se acumula en la superficie de la piel, en consecuencia, el cuerpo no se enfría de forma tan eficiente. Este mismo impacto negativo es uno de los factores que afectan a la transpirabilidad de los tejidos.
La humedad tiene un papel fundamental, incluso para la supervivencia a altas temperaturas: cuando el aire está seco es posible sobrevivir más de 20 minutos incluso a temperaturas de más de 100ºC. Con humedad en el aire, no se podría sobrevivir más de unos minutos a una temperatura de 45ºC.
Además, la evaporación puede ocurrir incluso en climas fríos de montaña. En estos climas la humedad no es tan importante para la refrigeración del cuerpo, aunque sí que tiene un efecto contrario: al humedecerse por el sudor, la piel es más conductiva, lo que hace que los termorreceptores de la piel estén más expuestos al frío del ambiente. Como consecuencia, se experimenta una sensación mayor de frío que si la piel estuviera seca. Por eso es fundamental tener un sistema de vestimenta que en todo momento nos permita estar secos y protegidos de las fuentes de pérdida de calor. El viento afecta también a la tasa de evaporación y convección, en lo que se conoce como la sensación térmica producida por el viento; de ahí la importancia de que las terceras capas, además de ser impermeables y transpirables, sean también cortavientos.
En resumen, para obtener la máxima comodidad en la montaña en cuanto a obtener el máximo rendimiento de las prendas, se necesita una planificación de la actividad a realizar, y una estrategia en el uso y selección de cada una de las prendas que compondrán el sistema de capas.
Referencias
Tiessasie-Yilma, K., & Yilie Limeneh, D. (2021). Review on Moisture Management Finish: Mechanism and Evaluation. Journal of Natural Fibers. Doi: 10.1080/15440478.2021.1966566
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