Por OS2O Design Team

Como vimos en el post anterior, la funcionalidad de una membrana transpirable es la de permitir que el vapor caliente (que produce el cuerpo a través del sudor) provocado durante la actividad deportiva salga a través de ella. Este proceso ocurre porque la membrana es permeable al aire debido a su construcción microporosa.

¿Cómo se mide la permeabilidad en los tejidos microporosos? 

Existen dos métodos para medir la permeabilidad del vapor de agua:

  1. Aplicando procedimientos que simulen el proceso de sudoración del cuerpo, donde la medición resultante sea la transferencia de calor húmedo por evaporación. Este método es mayormente utilizado para trabajos de investigación.
  2. El utilizado para el control de calidad de los tejidos. Dentro de las normativas para la medición de la capacidad impermeable de las membranas, la más utilizada por las empresas especializadas en el desarrollo de tejidos corresponde a la normativa Japonesa, más conocida como JIS (Japanese Industrial Standard). El test utilizado para la medición de permeabilidad al vapor de agua en tejidos microporosos es el JIS L1099:2006. Y para los tejidos que utilizamos para desarrollar nuestros productos es la variante B1, que explicamos a continuación.
Diferentes dimensiones de tejidos microporosos. 1 nanometro es la millonésima parte de un milímetro

¿Por qué usamos este método? 

El método B1 está especificado para medir el transporte del vapor de agua cuando el tejido está en contacto directo con el agua, siendo esta la situación más cercana al funcionamiento real de la prenda. Para realizar esta medición, se utiliza una sustancia desecante: acetato de potasio que atrae la humedad para valorar el transporte de vapor del interior al exterior del tejido.

El test JIS L1099:2006 B-1 mide el peso del agua que pasa a través del tejido (que sale), lo que simula el contacto de la prenda con el sudor (en estado líquido) y la capacidad permeable del vapor de agua de ese sudor en contacto con el tejido. El test JIS L1099 B-1 es el mejor para medir la capacidad de los tejidos hidrófilos; usando este test el valor máximo es de 30,000g/(m2·24hrs).

Vaso permeable Método B-1 (método del acetato de potasio) 

Existe otra medida relacionada con la permeabilidad al vapor de agua: la permeabilidad al aire. Este parámetro depende del diferencial de presión entre el interior y el exterior del tejido, que no suele variar apenas en una situación real, por lo que no es representativo para el funcionamiento en acción de las prendas. Sin embargo, se ha convertido en uno de los elementos más visuales para el marketing, ya que puede verse cómo el aire (burbujas) pasa a través del tejido, siendo una imagen muy clara de cómo supuestamente ese tejido “transpira”. 

La importancia de detallar el test realizado

Dentro de los diferentes tests para medir la permeabilidad del vapor de agua, hay que destacar que sus valores no son correlativos. Cada uno ofrece unos valores particulares y su interacción con la construcción específica del tejido y el tratamiento repelente al agua que se le aplica, influyen en los resultados del test. Ante el resultado de la capacidad permeable de un tejido o una prenda, además del tipo de test, se debe especificar la composición del mismo. En OS2O detallamos la composición y los test realizados en cada una de nuestras prendas.

En ocasiones, el mismo tejido puede dar diferentes valores dependiendo del test realizado. Incluso, existen diferencias entre los valores de los tejidos y las prendas confeccionadas con esos tejidos. Cuando nosotros realizamos un test al tejido, obtenemos valores de permeabilidad del agua más elevados que los que detallamos en la descripción de los productos porque no representan la funcionalidad real de las prendas.

Factores que afectan a los tests de permeabilidad

Los resultados de los tests son una referencia de la calidad de los tejidos. Sin embargo, esos valores no son indicadores directos de cómo va a comportarse la prenda. Incluso dentro de las mediciones, es la interacción de diversos factores lo que determina el valor final:

  1. Temperatura

La temperatura influye en el equilibrio, en la dinámica de la humedad y el vapor. En la montaña se tienen cambios de temperatura constantes. Incluso las diferencias entre la mañana, el mediodía y la noche pueden ser drásticas. Por ejemplo, el vapor de agua que se evacúa mediante una membrana microporosa se puede ver afectado por una bajada de temperatura brusca y ese vapor se puede transformar en gotas de agua. 

  1. Humedad

La diferencia de humedad entre el interior (en contacto con la piel o la primera capa) y el exterior (ambiente) tiene un papel fundamental.

  1. Velocidad del viento

En los test de laboratorio (en condiciones controladas), la velocidad del viento no es representativa de las situaciones reales que se viven en la montaña. La velocidad del viento afecta al diferencial de presión entre el interior y exterior del tejido. 

  1. Tipo de membrana

Existen dos tipos de membranas: hidrofóbica e hidrofílica. En ambas, el proceso de difusión es el encargado de absorber el vapor de agua desde el interior de la membrana y a través de los microporos, expulsándolo hacia el exterior. En función de la temperatura exterior se evapora; si hace mucho frío puede volver a condensarse en forma de gotas de agua.

  • Tejidos hidrofóbicos: absorben una mínima cantidad de humedad. Están fabricados principalmente por PoliTetraFluoroEtileno expandido (ePTFE). El ejemplo más claro es la membrana eVent® utilizada en nuestra chaqueta Breathout Pro que funciona mediante un proceso físico también denominado mecánico. Si las condiciones ambientales consisten en una alta humedad y una temperatura elevada, la transmisión de la humedad interior es insuficiente.  Si se compromete el proceso de difusión, se genera una sensación desagradable de estar mojado. Además, se puede comprometer el equilibrio térmico: si esa humedad no se evapora, el cuerpo no se enfría. Nuevamente, no recomendamos que las chaquetas impermeables / transpirables se usen como cortavientos.
  • Tejidos hidrofílicos: tienen una gran capacidad de absorber la humedad. Están fabricados en PoliUretano (PU) como la membrana O2 o el tejido StretchShell PRO. A diferencia de las membranas mecánicas, la base de su funcionamiento es un proceso químico. Las moléculas de vapor de agua tienen una carga positiva y el tejido hidrofílico de poliuretano está cargado negativamente, atrayendo el agua a través de la membrana de poliuretano. El líquido es absorbido de forma eficiente y transportado al exterior para su evaporación. La fuerza encargada de este proceso es el diferencial de presión que existe entre el calor y la humedad del interior y el exterior del tejido, en base a la segunda ley de la termodinámica. La humedad se mueve hacia la zona seca para lograr un equilibrio. De esta manera, el aire húmedo y cálido (vapor de agua) del interior de la membrana fluirá hacia el aire seco y frío del exterior.

El tratamiento repelente al agua DWR: la clave en la funcionalidad de las prendas impermeables 

Además de los anteriores factores, es el tratamiento repelente al agua una de las claves para que las prendas técnicas mantengan sus altas prestaciones. El deterioro del tratamiento DWR (Durable Water Repellency) afecta directamente a la capacidad de transporte del vapor de humedad de los tejidos. 

¿Qué ocurre si el DWR ha desaparecido?

Si la humedad del exterior es superior al porcentaje de la humedad del interior, el sudor no puede transformarse en vapor y salir al exterior de la membrana. El resultado es la sensación de estar mojado. 

Tratamiento DWR aplicado tras lavado

Es muy importante mencionar esto porque los tests que se hacen para medir el transporte de la humedad se realizan siempre en condiciones secas. Condiciones que obviamente varían cuando los tejidos son usados en actividad. El buen cuidado y mantenimiento de una prenda de membrana impermeable y transpirable es de vital importancia. 

Referencias

Shishoo, R.(ED.). (2005).Textiles in Sport. Woodhead Publishing Limited.